Los agricultores constituyen alrededor del 70% de la población de Nepal, y muchos de ellos viven en valles y laderas donde aplanan la tierra para maximizar el área cultivable. ¿Te gustaría ser voluntario y tener la oportunidad de conocer esta realidad de cerca? Estamos colaborando con algunas de estas familias rurales para ayudarles en sus tareas diarias.
Como voluntario, trabajarás directamente con la familia local que te acogerá, ayudándoles en la siembra, mantenimiento y cosecha de sus cultivos durante todo el año. No es necesario contar con experiencia previa, pero será muy beneficioso tener un buen nivel de resistencia física, ya que el trabajo es bastante manual. Vivirás y compartirás las comidas con los habitantes locales en sus tradicionales casas de barro y ladrillo. Este tipo de inmersión te permitirá vivir bajo las mismas condiciones que una familia rural típica del interior de Nepal: acostándote temprano y despertándote temprano.
La inmersión será total. Las comidas consisten en Dal Bhat, un plato típico y delicioso compuesto por arroz, lentejas y verduras, sazonado con especias locales. El Dal Bhat se sirve dos veces al día: alrededor de las 8:30 a.m. como desayuno y luego a las 6:00 p.m. como cena. En una de las casas con las que trabajamos, nuestra ONG local ha instalado una ducha, pero en la mayoría de las demás casas solo hay un grifo exterior con un pequeño balde para asearse. Los baños también son simples, en su mayoría muy rústicos, así que debes estar preparado para vivir en condiciones básicas. Sin embargo, la región es increíblemente hermosa y la experiencia vale la pena.
Los voluntarios llegarán al aeropuerto de Katmandú, la capital del país, donde serán recibidos por un miembro de nuestra ONG asociada. El primer día, los voluntarios se alojarán directamente en una Guest House en Katmandú para descansar. Al día siguiente, realizarán un recorrido por la ciudad acompañado por un miembro de la ONG local. En este día, conocerán los principales puntos turísticos y se familiarizarán con el país. El tercer día, los voluntarios viajarán a una ciudad cercana a Katmandú, donde también serán recibidos a su llegada y alojados en una casa de familia que trabaja con el proyecto. El transporte hasta allí está incluido en el costo del programa, y nuestro equipo local se encargará de asistirte para tomar el autobús correcto.